Una serie de informes de ventas de mayo de diferentes regiones y compañías afirman que la caída en la demanda de vehículos nuevos que al menos algunos ejecutivos de la industria temían no ha ocurrido, por los menos hasta ahora.

Según cifras preliminares de la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China, BYD el fabricante Chino, impulsó las ventas en un 14 % en mayo en comparación con abril.

Ese crecimiento estuvo por encima de la mejora mensual del 2,4% reportada por Tesla en el mercado de vehículos más grande del mundo. Aun así, los inversores dieron un empujón a las acciones de Tesla.

En Estados Unidos, Ford dijo que sus ventas de vehículos en mayo aumentaron un 10,7%. Las ventas de la línea de camionetas pickup de la serie F aumentaron casi un 43 %. Volvo Cars dijo que sus ventas de mayo aumentaron un 31%.

El grupo comercial de la industria automotriz del Reino Unido dijo que las matriculaciones de automóviles nuevos en mayo aumentaron un 16,7% por décimo mes consecutivo de crecimiento. Kia, Hyundai, Honda y Toyota reportaron la semana pasada sólidas ventas en los Estados Unidos.

Según Wards Intelligence, las cifras preliminares de ventas de mayo muestran que las ventas de automóviles y camiones ligeros en EE. UU. lograron un ritmo de ventas anualizado de 15,05 millones.

Eso está muy por debajo de los niveles previos a la pandemia que oscilaban alrededor del nivel de 17 millones, pero claro, no es una recesión.

Las cifras completas de ventas del segundo trimestre en EE. UU. de todos los fabricantes de automóviles no se publicarán hasta principios de julio.

Pero con base en los primeros cinco meses del año, los fabricantes de automóviles de Detroit se apegan a las previsiones de ganancias relativamente sólidas para el 2023, un punto que los líderes de United Auto Workers utilizaron la semana pasada para reunir a los miembros para luchar por grandes aumentos salariales en las negociaciones contractuales de este otoño.

De acuerdo, decir que no hay recesión en las ventas de automóviles en un momento de aumento de las tasas de interés y tensión geopolítica es como hablar de algo donde nadie sabe lo que puede ocurrir.

Pero la mejora en el suministro de vehículos y la sanación de las cadenas de suministro parecen estar coincidiendo con una demanda resiliente, y es una buena noticia.

 

Fuente: Reuters

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